Cómo dirigir una reunión general después de dar una mala noticia

Escrito el 27/05/2025
5 minutos


El desafío del día después

La noticia ha caído como un balde de agua fría: una reestructuración, despidos, un giro inesperado. El ambiente está cargado de ansiedad y el futuro se percibe incierto. En este escenario, el líder se enfrenta a uno de sus retos más complejos: convocar una reunión general (All-Hands) no para celebrar, sino para explicar, alinear y, sobre todo, sanar. ¿Cómo se puede dirigir una conversación difícil sin que la negatividad lo consuma todo? ¿Cómo transformar el miedo en un impulso productivo?