Por The Economist
Recibir un paquete es fácil. Enviarlo de vuelta no lo es. Volver a empaquetar, imprimir etiquetas y enviarlo de regreso al vendedor es una experiencia cada vez más familiar para los compradores en línea. En Estados Unidos, el 21% de los pedidos en línea, por un valor aproximado de $218 mil millones de dólares, fueron devueltos en 2021, según la Federación Nacional de Minoristas, frente al 18% en 2020. Para ropa y zapatos, puede alcanzar alrededor del 40%. Es un dolor de cabeza para los minoristas.